Un Colunga que dominó la mayor parte del partido, arrancó un empate en su visita al Tineo.

Siguen negados de cara al gol. Descontando lo sucedido el pasado domingo ante el Praviano, el Colunga, crea ocasiones que al final, no materializa. Ayer, en el campo municipal de San Roque, volvieron a gozar de ocasiones de gol que se terminaron transformando.

 

Se adelantaron los locales por mediación de Juan Manuel con un gol que apunto estuvo de evitar Carrio.

El empate llegaría a los 28 minutos; una jugada de Abraham finaliza con un pase a Zucu quien en situación dudosa, se aprovecha del rechace de un contrario, para plantarse solo delante del portero rival ante la pasividad de la defensa al ver al línea con el banderín levantado.

Una vez lograda la igualada, el Colunga, se hizo dueño y señor del partido, no dejando a su rival crear la mínima oportunidad de peligro.

Finalizado el primer tiempo, el segundo, marchaba por los mismos derroteros que el primero, un Colunga mandón, muy serio, raseando el balón y tocándo desde la línea defensiva a la de ataque en busca de ese segundo tanto que le pusiera por delante en el marcador. Este gol llegaría fruto de un remate de cabeza de Naya a una falta sacada por Abraham, pero el árbitro había pitado una falta anterior de marcos.

A falta de 3 minutos mas el descuento, el colegiado, expulsó a Daniel Girol por doble amarilla y aquí, si se crecieron los locales, hasta el punto, de que por dos ocasiones, Carrio Quílligan, salvó a su equipo de la derrota con intervenciones de mucho mérito como reconocieron sus compañeros en el campo.

Llegamos así a los últimos segundos del partido, momento en el que sucede un hecho que pudo hacer cambiar el resultado final; un centro de Abraham, es peinado por Naya y cuando Luis iba en disposición de alcanzar el balón, pegado al poste izquierdo de la portería rival, es sujetado por un contrario sin que el árbitro señalase absolutamente nada, después de ver la jugada con toda claridad.

Finaliza así un partido, que como decíamos anteriormente, el Colunga mereció ganar.

Ponemos en el siguiente vídeo, el instante en el que se produce esta última acción.